Al igual que usted, su gato también puede sufrir de estrés. Puede que aún no haya pensado en ello porque crea que su gato vive una vida relajada y feliz. No hay nada más que se aleje tanto de la realidad porque su gato también tiene que aprender a hacer frente al estrés.
Enfermedades físicas como la pérdida de pelo o la falta de apetito pueden causar estrés. El gato empieza a mostrar un comportamiento llamativo o empieza a arañar las paredes y los muebles. También puede que empiece a marcar el territorio dentro de la casa. El gato se aísla y sufre de abatimiento.
Los gatos son muy susceptibles a los cambios. Un nuevo miembro en la familia, una mudanza o incluso un cambio mínimo dentro de la casa puede desestabilizar el equilibrio emocional del gato. Eso causa estrés al gato.
El remedio de Flores de Bach nº 111 ayuda a su gato a adaptarse mejor a situaciones nuevas.
Los gatos se estresan si se sienten amenazados dentro de su propio territorio. Puede que el causante sea otro animal. Algunos gatos tienen miedo a moverse libremente por la casa. También el hecho de tener que compartir el comedero o el bebedero puede hacer que el gato se sienta estresado. Eso conlleva que el gato siempre tenga que tener a vista al otro gato. Eso causa mucho estrés al gato.
Tal vez no lo crea posible, pero incluso un gato que se pasa el día durmiendo puede sufrir estrés. El aburrimiento constante puede causar estrés crónico. Vigile a su gato, porque este tipo de estrés puede ser muy difícil de reconocer.
El estrés también puede deberse a causas físicas. Sufrir de una enfermedad o tener que tomar medicamentos (muchas veces a la fuerza) puede causar estrés. Además, es posible que su gato tenga que ir al veterinario bastante a menudo debido a la enfermedad. El tener que meterse en el transportín y el camino hasta el veterinario también puede causar estrés en el gato.
Una noche de octubre de 2016 escuchamos un maullido extraño en nuestro jardín. Salí al exterior y encontré un pequeño gatito rojizo.
Entonces le empezamos a dar el remedio de Flores de Bach nº 111, ¡el abatimiento ha ido desapareciendo y funcionó muy bien!
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